martes, 3 de mayo de 2011

Slow, bueno para el alma

"La moda no existe sólo en los vestidos. La moda tiene que ver con ideas, con la forma en que vivimos, lo que está sucediendo". Esta es una de las citas más conocidas de la mítica Coco Chanel, verdadero icono del mundo de la moda. Y, a día de hoy, es una teoría que se mantiene vigente, pese a los años transcurridos...

Pero, ¿cómo es la moda de hoy? ¿qué es lo que sucede en estos momentos? Vivimos inmersos en una sociedad en la que continuamente se nos incita al consumo. Y particularmente en el sector de la moda. Las tendencias van y vienen a un ritmo vertiginoso, la vida útil de cualquier prenda no va mucho más allá de la misma temporada en la que sale al mercado...

Detrás de la moda hay un proceso largo y complejo, que va desde el cultivo de la materia prima, como puede ser el caso del algodón, o la producción en un laboratorio de la fibra en cuestión, hasta el momento en que la prenda, ya diseñada y confeccionada es adquirida por el consumidor. Y ni siquiera acaba aquí. Desde que, afortunadamente, tenemos conciencia de las limitaciones de vivir en un planeta que no tiene infinitos recursos, debemos plantearnos también qué ocurre una vez que la prenda cae en desuso –en EE.UU. se tira a la basura una media de 35Kg. de ropa por persona y año ...son cifras que, cuanto menos, dan qué pensar–. De este  larguísimo proceso se deriva una serie de consecuencias como son el consumo de recursos –unas veces renovables, pero otras no–, de energía –no sólo en producción sino también en desplazamientos– y la generación de una cantidad grande, por no decir desproporcionada, de residuos textiles –que, por supuesto, no siempre son biodegradables, ni mucho menos...–. A estas consecuencias, de carácter medioambiental, se le suman otras de carácter social como son la explotación de la mano de obra, en condiciones infrahumanas, en países subdesarrollados o en vías de desarrollo  ...o a veces ni siquiera tan lejos.

Buscando la posible aplicación del desarrollo sostenible a la industria textil es como surge el movimiento que se ha dado en llamar slowfashion. Se trata de una moda con valores éticos y con una filosofía de transfondo que apuesta por un consumo responsable; por unos materiales duraderos, de calidad y unos procesos respetuosos con el medio ambiente y con todas las personas involucradas a lo largo de la cadena; por una producción ceñida en la medida de lo posible al ámbito local; y sobretodo por el desarrollo de un estilo –del que también hablaba Coco Chanel– propio y personal, por encima de tendencias caprichosas y pasajeras...

Por este motivo hace ya un par de semanas incorporamos a nuestra lista de blogs “sostenibles e imprescindibles” un nuevo “fichaje”, el Blog de Gema Gómez. En él, su autora nos explica detalladamente qué es y en qué consiste la “moda lenta” y nos desvela todas las claves, a través de entradas y también de charlas y talleres, para la evolución que se nos exige hacia un futuro sostenible, también en el mundo de la moda.

Imagen: http://fortyredbangles.wordpress.com

3 comentarios:

  1. Hago el SLOW! Un post genial! Qué viva el SLow Fashion!

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  2. Gracias por tu apoyo Margaret!! Y ojalá que aunque esto vaya así, despacio, cada vez seamos más...

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  3. Claro que sí, el Slow cabe en todos los aspectos de nuestra vida.

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